La construcción en seco o construcción en drywall como comúnmente se le conoce, cada vez gana más adeptos en el sector de la construcción, sin embargo aún persisten algunos mitos con respecto a su uso que generan algunas inseguridades o dudas en quien recibe algún tipo de construcción en la cual este novedoso material interviene. A continuación recopilamos 7 de las consideraciones más frecuentes que tiene el consumidor con respecto a su uso.
1. Cuando golpeo la pared suena hueco.
Las paredes construidas en seco son sólidas. Es necesario entender que el ruido que podemos percibir al golpear una pared de construcción en seco no implica que la misma esté hueca en su interior, y que por ello tenga un comportamiento deficiente a la hora de aislar acústicamente. Muy por el contrario, si no sonara a hueco, la pared no tendría las características de resistencia, aislamiento y durabilidad propias de esta tecnología constructiva. Si al golpear una pared de construcción en seco suena “a hueco”, esto se debe a las características intrínsecas del sistema y no porque el mismo sea deficiente.
2. Se escucha todo lo que pasa del otro lado de la pared.
La construcción en seco ofrece los mejores estándares en aislamiento acústico. Tanto los estudios de grabación como las principales cadenas de hoteles, con enormes exigencias acústicas para sus divisiones internas, utilizan sistemas de construcción en seco porque son más eficientes en el aislamiento sonoro. Los sistemas de construcción en seco aíslan mejor el sonido que las obras húmedas, pero esto no es posible sin la instalación de materiales aislantes en su interior, en distintos espesores, para asegurar el confort acústico de la vivienda. Es decir, si se escucha todo del otro lado del ambiente, se debe a que la pared no está debidamente aislada, y no a una falencia del sistema constructivo. Un muro liviano de construcción en seco (debidamente aislado) puede aislar acústicamente hasta un 70% que uno (cuatro veces más pesado) de obra húmeda.
3. No se pueden colgar cuadros u objetos pesados.
Liviano no es sinónimo de débil. La construcción en seco soporta gran cantidad de peso. En todas las paredes materializadas con sistemas de construcción en seco con placa de yeso, un cuadro o cualquier objeto que pese menos de 1 Kg puede colgarse con un clavo común, en cualquier parte de su superficie. Asimismo, los objetos de hasta 15 kg también pueden colgarse en cualquier parte de la superficie, pero no se deben utilizar clavos, sino tornillos. Los mismos deben estar acompañados por tarugos para placa de yeso, que se venden en todas las ferreterías.
4. Las paredes no resisten el agua.
La construcción en seco evita problemas usuales de humedad. No solo se caracteriza por la no utilización de agua durante el proceso constructivo, sino también por evitar los problemas más frecuentes de humedad, atribuibles a la construcción con ladrillos. Existen en el mercado placas resistentes a la humedad (son de color verde) que se utilizan en espacios con humedad moderada, como baños, cocinas y lavaderos. Además, en caso de existir alguna fuga de agua, la reparación en sistemas en seco es mucho más rápida, fácil y limpia, ya que el sistema permite detectar fácilmente el lugar de la fuga, que es donde la placa de yeso se humedece. su reparación es muy fácil, se hace un corte sobre las placas, se repara el daño, y se vuelve a tapar con un trozo de la misma placa de yeso.
5. Es un sistema rígido para decorar
La construcción en seco permite crear infinidad de diseños para construcción dadas las características mecánicas de sus componentes, permite realizar proyectos con diseños ambiciosos y versátiles: cielorrasos calados, paredes y escaleras curvas y grandes aberturas. Permiten materializar viviendas flexibles, que sus habitantes puedan remodelar y acondicionar de acuerdo a sus necesidades, gustos personales y estructura familiar. A la hora de modificar una planta, la construcción en seco permite hacer obras totalmente limpias y sin escombros, sin necesidad de que los habitantes tengan que mudarse durante el proceso. La oferta del mercado es cada vez más amplia y versátil para diseñadores ambiciosos de crear espacios innovadores.
6. Es débil frente al fuego
La construcción en seco reduce al mínimo las posibilidades de propagación de incendio, dada la baja o nula combustibilidad de los materiales que componen los sistemas, se reduce al mínimo el riesgo de incendio. Asimismo estos sistemas evitan la propagación del fuego, tanto al resto del edificio como de un edificio a otro. Es importante destacar que si la pared está sin aislar, el fuego se propagará más rápido. Por otra parte, el bajo peso estructural de las paredes construidas en seco (cuatro veces menos que una de ladrillos), generará daños y accidentes considerablemente menores ante un posible colapso.
7. Sólo sirve para soluciones transitorias
La construcción en seco es durable, segura y de fácil mantenimiento, es rápida, limpia y liviana, características que la hacen ideal para levantar una pared o hacer una división que consideremos desarmar en un futuro próximo. Esto no significa que la construcción no pueda también ser durable. A diario nos encontramos en medio de obras con esta tecnología constructiva, pero no sabemos que están hechas en seco. Viviendas, hospitales, laboratorios, oficinas comerciales, son sólo algunos de los ejemplos que tenemos para comprobar que la construcción en seco resiste el paso del tiempo, y con una ventaja adicional, y es que su mantenimiento es más bajo que el de las obras ejecutadas bajo el sistema de construcción tradicional.